redirección

viernes, 25 de noviembre de 2011

Mis hijos proscritos

Hoy voy a dejar, como página a la derecha, algo distinto. Ni siquiera yo sé muy bien qué es. No sabría si calificarlo de cuento, de escrito poético, o de qué sé yo. Lo que está claro es que es prosa, pero no se puede considerar, en sí, una narración. Lo encontré entre mis papeles, cuando hacía una mudanza. Está fechado en junio de 1983 (sí, no es un error, hace más de 28 años). Por aquella época yo ya escribía. Escribía más y con más ambición que ahora. Y recuerdo haber escrito esto. Pero, al leerlo, después de tantos años, me ha parecido muy extraño. No puedo juzgar si bueno o malo. Pero raro, muy raro.

Y no digo más. Leedlo y me contáis qué os parece.

(Para todo aquel que esté haciendo cuentas, y a pesar de que en mi perfil no he especificado la edad, diré que en 1983 yo tenía dieciseis años. El cálculo es fácil).

4 comentarios:

  1. Hola Pepa, esperaba leer el escrito que habías rescatado entre tus papeles de hace muuuuuuchos años, pero no lo encuentro por tu blog ¿lo has colgado ya?
    Perdona que no me haya presentado, estoy en el blog de Club de Lectura El bolígrafo verde y sentí curiosidad por leer lo que habías escrito hace tanto y leído ahora.
    Si me dices cómo puedo leerlo, te estaría agradecida.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Noctiluca, está colgado como página a la derecha, con el mismo título "Mis hijos proscritos". Espero que te guste.

    Pepa

    ResponderEliminar
  3. Pues qué quieres que te diga, que raro es un poco, pero a mi me gusta. Quizá es que estoy demasiado acostumbrada a ese caos de genialidad que tienes en tu cabeza. Hace muchos años que lo escribiste, es cierto (me acordaba de él), hecho que confirma lo que siempre he dicho: ya apuntabas maneras...
    Mariví

    ResponderEliminar
  4. Lo que escribes es muy profundo, con un halo de tristeza-desesperación típica de la adolescencia, que queda reflejado magistralmente. Me ha hecho pensar en lo duro que es a veces la vida, el desamor, la desesperanza.

    ResponderEliminar