Está claro que si no tienes retos, si no sueñas, nunca conseguirás nada distinto.
Hace unas semanas dejé una entrada comentando el libro de Haruki Murakami "De qué hablo cuando hablo de correr".
En esa reseña decía que el libro me había gustado porque me había identificado con la comparación que hace el autor entre prepararse para una maratón y escribir.
También decía que me había acercado a mi marido y a mí misma, pues ambos compartíamos un sueño, sin ser plenamente conscientes de ello: el sueño de conseguir nuestros retos. En mi caso, como sabéis, se trata de publicar alguna de mis obras y tener cierto éxito. En el suyo era completar la media maratón de Madrid.
Como sabéis, el mío aún no se ha cumplido, pero mi marido, después de un duro entrenamiento y una lesión, hoy ha hecho realidad el suyo. ¡Enhorabuena! Verlo me da esperanzas y me enseña que el camino del esfuerzo, tarde o temprano, da sus frutos.
Cuando consigues lo que te propones, es una gran satisafacción. Gracias
ResponderEliminarSin duda el relato que más me ha gustado, por lo personal que tiene y por la emoción que transmite. Enhorabuena a los dos por pelear por un sueño, se cumpla o no merece la pena.
ResponderEliminarVirginia
Enhorabuena, los dos lo conseguiréis.
ResponderEliminar¡¡Mi más sincera enhorabuena Santi!! Ahora nos queda que (por fin) Pepa publique cualquiera de sus obras. Como ya he dicho innumerables veces, me gustan todas.
ResponderEliminarVicky