redirección

martes, 27 de septiembre de 2011

Si a los tres años no he vuelto/Cielos de barro

Además de publicar aquí lo que escribo, me gustaría comentar lo que leo. Mis dos últimas lecturas han venido una como consecuencia de la otra.

Decidí empezar "Si a los tres años no he vuelto" de Ana R. Cañil, publicado por Espasa. Tengo que admitir que el motivo que me llevó a elegir este libro no fue puramente literario, sino más bien interesado. La editorial Espasa valoró una de mis novelas ("Ni patria ni tribu") y, depués de dedicarme algunos comentarios elogiosos que realmente valoro, decidió no publicarla. Sin embargo, "Si a los tres años no he vuelto" y "El bolígrafo de gel verde" son dos de los títulos por los que este año sí ha apostado la editorial y, he de reconocer, que tenía cierta curiosidad por ellos. Por eso de saber de la competencia y aprender.

Dedicaré otra entrada del blog a "El bolígrafo de gel verde", pero hoy me centraré en "Si a los tres años no he vuelto". El principio se me hizo duro. No engancha y, para mi gusto, hay un exceso de pretensiones. Además, se anticipa una novelita romántica de esas que realmente no me gustan. Sin embargo, a medida que el libro iba avanzando, la historia me fue atrapando hasta que conseguí devorarlo en un solo día. Eso no quiere decir mucho, porque yo leo muy rápido. Pero realmente me gustó. Me gustó bastante. Nada de la novelita rosa del principio. Al contrario, mucho gris y mucho ocre de la miseria de la guerra. Aunque dentro de la novela resuenan otras historias, hay que reconocer que está bien construída y que consigue tocar las emociones. Al menos las mías.

Como decía, resuenan en ella otras historias. Parte de "Inés y la alegría", de Almudena Grandes, la del principio y, sobre todo, "La voz dormida" de Dulce Chacón. Para mí la mejor de las tres. La más emotiva, la que mejor conectó conmigo en un trío de autoras e historias que, bajo mi punto de vista, tienen en común la cercanía que trasmiten. Eso sin desmerecer a mi preferida, Almudena, de la que he leído todo lo que ha publicado, columnas incluídas. Sin embargo, de ella, mi favorita es "El corazón helado".

Y, como decía, la lectura de "Si a los tres años no he vuelto", me llevó s recordar "La voz dormida" y, al encontrar en la estantería de mis padres otro libro de esta autora, "Cielos de barro", me animé con él. Lo recomiendo. De lectura algo más difícil que "La voz dormida", debido a la forma de narración empleada, a través de la conversación de uno de los personajes, descubre poco a poco una historia descarnada, si cabe más dura que la de la cárcel de Ventas. Una historia, por desgracia más común, que sucede en el marco de la Guerra Civil pero que podría suceder en cualquier otro tiempo, ya que la vida sometida de los habitantes de ese cortijo, podría darse en cualquier momento durante los últimos tres o cuatro siglos.

Y hasta aquí, estas dos novelas. El próximo, el comentario sobre "El bolígrafo de gel verde". Si alguno de vosotros ha leído las novelas a las que me refiero, animaos a compartir algún comentario.

1 comentario:

  1. Pues no he leído ninguna de las dos. Espero hacerlo pronto y comentamos

    ResponderEliminar